En
las entregas anteriores hemos reflexionado sobre Dios como creador, dueño y
sustentador de TODO lo que existe. Hemos reflexionado también sobre nuestro rol
como administradores o mayordomos, ahora, en esta última entrega, el Pastor
Rafael Montalvo nos lleva por los caminos de saber qué nos toca administrar,
pues la ignorancia puede llevarnos a fatales consecuencias. Los antiguos
decían: “la ignorancia es audaz”.
La mayordomía del cristiano (3)
Qué nos toca administrar
Es importante saber qué nos toca administrar
pues la ignorancia puede llevarnos a fatales consecuencias. Porque lo sepamos o
no, un día tendremos que dar cuentas por lo que Dios nos entregó en nuestras
manos. No podemos ser insensatos, faltos de sabiduría, irresponsables y
desperdiciar las áreas donde Dios nos ha puesto a administrar.
Luc. 16; 19
¿De
qué somos administradores o mayordomos?
1.
Cuerpo
2.
Palabras
3.
Tiempo
4.
Familia
5.
Posesiones.
6.
Dones y Talentos. Capacidades
7.
Llamado. Vocación
8.
Posiciones. Lugares donde Dios nos
ha puesto.
9.
El planeta, la tierra, la
naturaleza.
10.
Evangelio
1. Nuestro ser integral. Espíritu, alma y cuerpo.
Somos administradores de la vida que Dios nos ha dado. Somos mayordomos de
nuestro cuerpo. 1 Cor. 6:15-20. No tomaré el cuerpo para una
ramera...glorifiquemos a Dios en nuestro cuerpo...los cuales son de Dios.
Nuestra alma y espíritu. "Porque habéis sido comprados por precio;
glorificad, pues, a Dios en vuestro cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales
son de Dios".
Estamos obligados, como cristianos, a cuidar
nuestro cuerpo de la fornicación (2 Cor. 5:10). Debemos cuidarlo. Cuidado.
Comida, bebida, ejercicios, descanso. Estrés. Exceso de trabajo. No descanso,
sueño. Exceso de pereza. Un cuerpo súper acomodado. Un extremo: El culto al
cuerpo y a la salud.
2. Palabras. Somos mayordomos de nuestras palabras.
Qué decimos, cómo lo decimos. Tenemos un poder en nuestras palabras…para
edificar y para destruir. Para dar vida o para dar muerte. Prov.18:21. Preguntémonos:
¿Cómo estamos usando nuestras palabras?
Mat. 12:36 “Mas
yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán
cuenta en el día del juicio. 37Porque por tus palabras serás justificado, y por
tus palabras serás condenado”.
Palabra ociosa: palabra para hacerle daño a los
demás, palabra inútil.
Ef. 4:29 “Ninguna
palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la
necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes. 30Y no contristéis al
Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la
redención”.
No podemos tener en nuestro haber como
mayordomos palabras corrompidas: Palabras obscenas, malas palabras, podridas.
La Biblia enseña también sobre juzgar con
nuestras palabras, maldecir, airarnos, enojarnos contra nuestros hermanos,
llamarle necio, etc.
Somos mayordomos, administradores de nuestras
palabras. Usemos nuestras palabras sabiamente. Construyamos, edifiquemos, impartamos
vida, animemos a los demás.
3. Del tiempo. Somos mayordomos del tiempo.
Tenemos unos años que Dios nos ha dado para
vivir (70, 80, 100). ¿Cómo vamos a administrarlos? La Biblia nos enseña a que
redimamos el tiempo. Lo aprovechemos, lo administremos bien.
«Todo
tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora» (Eclesiastés
3:1).
«Mirad,
pues, con diligencia como andéis, no como necios sino como sabios, aprovechando
bien el tiempo, porque los días son malos. Por tanto, no seáis insensatos, sino
entendidos de cuál sea la voluntad del Señor» (Efesios
5:15–17).
Las cosas que hacemos no las hacemos a “lo
loco”, sino en la voluntad de Dios.
Col.4:5 Redimiendo el tiempo. Aprovechando cada
momento oportuno.
Somos responsables de cómo usamos el tiempo que
Dios nos da. Estableciendo prioridades. Usando el tiempo para las cosas más
importantes.
¿Cómo
estamos usando el tiempo que Dios nos ha dado? ¿Estamos siendo buenos
mayordomos, administradores del tiempo que Dios nos da?¿O lo estamos
desperdiciando?
4. Familia. Matrimonio. Dios nos ha dado una familia ¿Cuál es mi responsabilidad frente a ella?
¿Qué espera Dios de mi en mi familia? Cuidar de los suyos. Equlibrio.
Padres apoyadores no son buenos mayordomos. Tampoco abusadores.
5. Posesiones. Casas, carros, dinero, recursos. ¿Cómo quiere Dios que yo use los recursos
que El me ha dado, que El ha puesto en mis manos? ¿Cómo quiere El que yo lo
invierta?
6. Talentos, dones. Espirituales y naturales. Capacidades,
habilidades
7. Llamado. Vocación. Carrera, profesiones
8. Posiciones, cargos. Lugar donde Dios me ha puesto.
Como pastor tendremos que dar cuenta a Dios.
Hebreos 13:17 "Obedeced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos; porque
ellos velan por vuestras almas, como quienes han de dar cuenta...". Como profesionales, jefes, gerentes,
también. Col. 4:1 "Amos, haced lo que es justo y recto con vuestros
siervos, sabiendo que también vosotros tenéis un Amo en los cielos". Ef.
6:9 "Y vosotros, amos, haced con ellos lo mismo, dejando las amenazas,
sabiendo que el Señor de ellos y vuestro está en los cielos, y que para él no
hay acepción de personas.
9. El planeta. La tierra. Ecología. La naturaleza.
10. Somos administradores de Su Evangelio.
Administradores del Reino de Dios. Este es el mayor bien que Dios nos ha dado a
administrar. Hemos sido encomendados a administrar los misterios de Dios. Somos
los encargados de administrar Su Reino. Evangelizar, discipular, influir en la
sociedad, ayudar a crecer a los demás. Tenemos una encomienda: Evangelizar y
discipular.
Somos administradores de los misterios de Dios.
De los planes de Dios.
Cuando nos
encontremos con el Señor ¿Qué nos dirá acerca de nuestra mayordomía? ¿Saldremos
aprobados, elogiados o nos sentiremos avergonzados?
En las diferentes áreas
mencionadas ¿qué evaluación me doy? ¿Cómo estoy? ¿Siento que estoy
administrando bien? Vida, cuerpo, palabras, tiempo, familia, capacidades, dones, talentos, recursos,
dinero, posiciones, naturaleza, Evangelio.
Dios me ha puesto en
esta tierra con un propósito. El quiere que yo administre Sus bienes, Sus
dones, las oportunidades que El me ha dado, posiciones.