¿Con quién no debería
casarse un cristiano, una cristiana?
Prédica hecha por Andrés Corson basada en los
artículos publicados por Lee Grady en la revista Charisma llamados: 10 hombres
con los que las mujeres cristianas nunca deberían casarse y 8 mujeres con las
que los hombres cristianos no deberían casarse.
Andrés Corson |
1. Un cristiano, una cristiana no debería casarse con alguien que no ama a
Dios. La Biblia dice en 2 Corintios 6:14: "No se asocien íntimamente
con los que son incrédulos. ¿Cómo puede la justicia asociarse con la maldad?
¿Cómo puede la luz vivir con las tinieblas?".
2. Un cristiano, una cristiana no debería casarse con una persona
mentirosa. El matrimonio se fundamenta sobre la confianza mutua. En Proverbios
20: 6 dice: “Muchos dicen ser amigos fieles, pero ¿quién encontrará uno
realmente digno de confianza?”. Un hombre de palabra, que diga la verdad, no es
fácil de encontrar, pero es un fundamento muy importante para un hogar.
3. Una mujer
materialista: esta mujer empobrece a su esposo. Casarse con una mujer así es
meterse en deudas.
4. Una cristiana no debe casarse con un play boy. Si planea casarse
con un hombre que cree que tener relaciones sexuales sin casarse está bien, es
muy probable que luego de casarse siga con esa vida sexual fuera del
matrimonio.
5. Un cristiano no debe casarse con una diva. Se creen el centro del
universo. Demandan de modo absurdo. No temen lastimar a nadie con tal de ser
consideradas el centro del universo. Una verdadera líder cristiana es una
persona humilde. Si no ves la humildad de Jesús en esa mujer, no te cases.
6. Una cristiana no debe casarse con alguien que evade sus
responsabilidades. Por ejemplo, si él conoció a Jesús después de un
divorcio y no cumple con su deber de sostener a los hijos de su otro
matrimonio, ese hombre no conviene.
7. Un cristiano no debe casarse con Dalila. Una mujer seductora puede
enceguecer a un hombre con sus encantos, puede romper su corazón y quitarle su
unción. Si un joven cristiano sale con una joven cristiana que se viste de modo
provocativo, que coquetea con otros hombres, que dice cosas indebidas, o que
piensa que el sexo fuera del matrimonio está bien, ese joven debe romper con
esa relación antes de quedar atrapado y perderlo todo, como le sucedió como a
Sansón, que hasta sus ojos perdió.
8. Un cristiano, una cristiana, no debe casarse con un adicto. Muchos
atados a los vicios lo niegan. No caiga bajo las terribles garras de la
codependencia.
9. No debemos casarnos con la mujer rencillosa. En Proverbios 21:9 y
25:24: “Es mejor vivir sólo en un rincón de la azotea que en una casa preciosa
con una esposa que busca pleitos” (en otras traducciones dice “rencillosa”,
“pendenciera”). Otro versículo, Proverbios 21:19: “Es mejor vivir sólo en el
desierto que con una esposa que se queja y busca pleitos” (o de mal genio). Y
en Proverbios 27:15: “Una esposa que busca pleitos es tan molesta como una
gotera continua en un día de lluvia”. No se casen con la mujer rencillosa.
A veces son rencillosas
porque no han sanado los conflictos del pasado (las amarguras tienen que ser
sanadas, los faltantes tienen que ser suplidos, los complejos, los argumentos o
etiquetas que tienen en contra de los hombres, los celos, malgenio y otras
herencias que tienen que ser sanadas).
Una mujer puede ser
rencillosa o cantaletosa porque esperan que el esposo supla lo que solo Jesús
puede suplir. Jesús le dijo a la samaritana: “Si bebes de esa agua volverás a
tener sed, pero si bebes del agua que yo te daré no tendrás sed jamás” (Juan
4:13-14).
Otra razón por la cual
una mujer puede ser cantaletosa es porque hay lucha de poder en la relación. La
Biblia dice que Dios entregó al hombre el rol de cabeza del matrimonio (1 Cor
11:3 y Efesios 5:23), pero la Biblia también dice que tanto el esposo como la
esposa son herederos por igual de la Gracia de Dios (1 Pedro 3:7), y también
dice que para que nuestras oraciones sean respondidas los dos tenemos que estar
de acuerdo (Mateo 18:19).
Algunos esposos son
acusados de no oír a sus esposas, otros son acusados de ser ellas las que
mandan en sus casas (“la de los pantalones es la mujer”). Ninguno debe ser
anulado. El hombre no debe anular a la mujer, no debe intimidarla, pero la
mujer tampoco debe anular al hombre. Tiene que haber un punto de equilibrio.
En defensa del hombre
acusado de no escuchar a sus esposas, recuerden que las perspectivas serán
siempre diferentes, pero ningún punto de vista es mejor que el otro. Son
diferentes y los dos son necesarios. Un hombre sabio oye el punto de vista de
su esposo, pero a esa perspectiva añade la suya.
10. No debemos casarnos con personas
controladoras: algunos hombres piensas que pueden convertir su matrimonio
en una dictadura en donde se hace lo que él quiere. Algunas mujeres creen que
pueden manipular para que se haga todo lo que ellas quieren. El matrimonio es
una sociedad y solo funciona cuando se practica la sumisión mutua, como dice
Efesio 5:21,22,25: “Sométanse unos a
otros por reverencia a Cristo. Sométase cada una a su marido como al Señor… ame
cada uno a su esposa tal como Cristo amó a la Iglesia”. Es la sumisión
mutua.
11. Las mujeres no deben casarse con el holgazán:
un hombre que se queda todo el día en casa viendo televisión y jugando mientras
la mujer trabaja para pagar las cuentas. 2 Tes 3:10 dice que “los que no están
dispuestos a trabajar que tampoco coman”. El hombre que no trabaja no tiene
derecho de casarse.
12. Las mujeres no deben casarse con un
narcisista: un hombre obsesionado con su apariencia no va a estar dispuesto
a sacrificarse por su esposa, nunca va a fijarse en ella porque él siempre se
considerará el centro.
13. No debemos casarnos con los abusadores:
hombres o mujeres que no controlan su mal genio, su ira. Personas violentas con
su boca y su cuerpo. No justifique la violencia, el mal genio. Esa persona
tiene un problema. Es un campo minado que en cualquier momento puede explotar.
Lo mejor es buscarse a un hombre manso.
14. No debemos casarnos con el “niño de mamá”,
un hombre al que la mamá le hace todo. Por otro lado un hombre no debe casarse con la mujer que no ha
cortado el cordón umbilical de su mamá. En Génesis 2:24: “El hombre deja a
su padre y a su madre, y se une a su esposa, y los dos se convierten en uno solo”.
Mucho cuidado con ese
hombre con más de 35 años que todavía vive con su mamita y la mamita le cocina,
le plancha la ropa, le limpia el cuarto… Hombres, mucho cuidado con la mujer
que da seña de que va a traer a la mamá a vivir a su casa y no necesariamente
de modo literal, sino que pone a la mamá en todo.
El mejor consejo para
elegir esposa está el Proverbios
31:30 (NTV): Engañoso es el encanto y
pasajera la belleza; la mujer que teme al Señor es digna de alabanza. Y el
mejor consejo para las mujeres elegir esposo está en 2 Samuel 16:7: “No te dejes impresionar por su apariencia
ni por su estatura, pues yo lo he rechazado. La gente si fija en las
apariencias, pero yo me fijo en el corazón”.
Predicación del 26
Febrero de 2014 en el Auditorio de la Iglesia El Lugar de Su Presencia - Bogotá
– Colombia - por Andrés Corson. Transcripción libre hecha por Milton Tejada C.
Contribuido de:
2 comentarios:
Muy buena perspectiva para decidir vivir feliz en familia
Muchísimas gracias Milton! Excelente artículo! Fácil de leer y muy práctico!! Fue de bendición! Un abrazo!
Publicar un comentario