domingo, 31 de mayo de 2015

Madre, un día y siempre

Honrarás a tu padre y a tu madre

Los Tejada Cruz somos una familia que ha crecido. Mi mamá, doña Carmen, al centro (con blusa morada), con sus hijos, nietos y biznietos... y todos los que forman parte de ella: esposos y esposas, un par de tios... Bendición de Dios!
¿Cuántos saben que tenemos opciones en la vida?
  • Nosotros elegimos  hacer o no hacer ciertas cosas.
  • Pero nuestras decisiones traen consecuencias que dictarán nuestro destino.
  • Honrar a nuestros padres es una opción… si los honras, optaste por obedecer a Dios. Si no lo haces, optaste por desobedecer a Dios.
 Honrar a tus padres es un mandato de Dios.
  • Dios no dijo: “si quieres puedes honrar a tus padres”
  • Él dijo: “Honra a tu padre y a tu madre”
  • ¡Es un mandato! Y tú, obedeces o no obedeces… es tu decisión.

Dios nos pide honrar a nuestros padres y punto. No nos da el lugar de jueces a los hijos. Ya llegó el tiempo o llegará en que somos padres y, al igual que nuestros padres, cometeremos errores. No somos perfectos. Estamos marcados por el pecado.

Qué significa honrar
·         Darle honor: venerar, apreciar, valorar, respetar
  • Estimar, reverenciar, enaltecer, premiar, obedecer.
·         Independientemente de si “lo merecen” o no (no es un pago, es una decisión, es obediencia a Dios).

Deshonrar es:
  • Irrespetar, no estimar ni valorar.
  • Expresarse mal de alguien, dañando su imagen delante de los demás.

Es más fácil honrar a una persona que me ha mostrado amor, respeto y aceptación, que una persona que nos ha herido una y otra vez.  Y a veces usamos esto como una excusa para no obedecer a nuestros padres como Dios manda.

Nuestra honra a los padres no es asunto de si ellos se lo merecen  o no, es asunto de si quiero honrar y obedecer a Dios o no.

Un mandamiento de Dios: nos manda a honrar a nuestros padres
·         Éxodo 20:12 /“Honra a tu padre y a tu madre, para que tus días se alarguen en la tierra que Jehová tu Dios te da.”
o   Al estudiar Éxodo 20, nos damos cuenta que los primero cuatro mandamientos tienen que ver con nuestra relación con Dios. Los restantes son con relación a nuestro prójimo, y es curioso que el primero de ellos sea el honrar a nuestros padres.
o   Y de todos los mandamientos es el único que tiene promesa con gran bendición.

·         Efesios 6:1-3 /  “Hijos, obedeced en el Señor a vuestros padres, porque esto es justo. Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa, para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.” (Efesios 6:1-3).

·         Mateo 26:39 y Lucas 2:51. Aún Jesús, el Hijo de Dios, se sometió Él mismo a sus padres terrenales y a Su Padre celestial (Mateo 26:39; Lucas 2:51). Siguiendo el ejemplo de Cristo, como cristianos, debemos tratar a nuestros padres de la manera en que deberíamos aproximarnos reverencialmente a nuestro Padre celestial (Hebreos 12:9; Malaquías 1:6)

Hay bendición al honrarlos:
Deuteronomio 5:16
“Honra a tu padre ya tu madre, como Jehová tu Dios te ha mandado, para que sean prolongados tus días, y para que te vaya bien sobre la tierra que Jehová tu Dios te da.” (Comentar).

Hay maldición al deshonrarlos:
Deuteronomio 27:16
“Maldito el que deshonre a su padre o su madre.  Y dirá todo el pueblo: Amen.” (comentar).     
[Prov.1:8, Prov.4:1, Prov.6:20, Prov.23:22-25]

Jesús nos dejó ejemplo como hijo obediente.                     
Lucas 2:51
“Y descendió con ellos, y vino a Nazaret, y estaba sujeto a ellos.”

Filipenses 2:8
“Y estando en condición de hombre, se humilló a sí mismo, haciéndose obediente hasta la muerte, y muerte de cruz”

Obviamente, se nos ordena honrar a nuestros padres, pero ¿cómo? Honrarlos tanto con nuestras acciones como con nuestras actitudes (Marcos 7:6). “El hijo sabio recibe el consejo del padre; Mas el burlador no escucha las reprensiones.” (Proverbios 13:1).

En Mateo 15:3-9, Jesús les recuerda a los fariseos el mandamiento de Dios de honrar a su padre y madre. Los fariseos obedecían la letra de la ley, pero mientras que honraban a sus padres de palabra, sus hechos probaban el verdadero motivo de su corazón.

Honrar es más que un servicio de labios. La palabra honor en este pasaje es un verbo, y como tal, demanda elegir una acción correcta.


Para un hijo menor, obedecer a sus padres va de la mano con honrarlos.

Eso incluye escucharlos, prestarles atención, y someterse a su autoridad. ¿Qué pasa si tus padres te piden hacer algo malo? En ese caso, debes obedecer a Dios antes que al hombre (Hechos 5:29).

El honor engendra honor. Dios no honrará a aquellos que no obedezcan Su mandamiento de honrar a sus padres. Si deseamos complacer a Dios y ser bendecidos, debemos honrar a nuestros padres.

Honrar no es fácil, no siempre es divertido, y ciertamente es imposible en nuestra propia fuerza. Pero el honor es un camino seguro para nuestro propósito en la vida: glorificar a Dios.

“Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.” (Colosenses 3:20).


 UN PRIMER PASO HACIA LA HONRA: PERDONAR

§  No es tu caso… no tienes raíces de amargura contra tus padres. Creciste en un hogar en donde primó el amor y recibiste sus cuidados. O, a lo mejor, sí tienes alguna razón para decir: papá, mamá… perdóname. Ese perdón significa cambio de rumbo…

·         sí, a lo mejor es tu caso como lo fue mío… (testimonio: hijo mayor). Entonces quiero decirte algunas cositas sobre el perdón.
o   En primer lugar, necesita perdonar a tus padres para ser perdonado por Dios. Mateo 6:12. “Perdónanos nuestras deudas, como también nosotros perdonamos a nuestros deudores.”
o   El perdón es un acto sin condiciones y sin medida. Mateo 18:21-22. “Entonces se le acerco Pedro y le dijo: Señor ¿cuántas veces perdonare a mi hermano que peque contra mí? ¿hasta siete?  Jesús le dijo: No te digo siete sino setenta veces siete”.
o   Es una actitud del corazón
o   Mateo 18:23-35. Los tres grandes errores del siervo que no quiso perdonar:
§  Se le olvido la gran deuda que le fue perdonada
§  Se cegó en su egocentrismo y orgullo.
§  Él podía perdonar, pero eligió no hacerlo.

·         El perdón es una decisión. No es que mis padres se lo merezcan o no, no se trata de qué tan grande fue lo que me hizo mi padre o mi madre…Si quiero ser obediente a Dios, estoy llamado a perdonar.

·         Es un acto de la mente, de las emociones y de la voluntad… (explicar).

TOMAR UN MOMENTO PARA PERDONAR.

 UN SEGUNDO PASO HACIA HONRAR A MIS PADRES: Poner en práctica la decisión de hacerlo (o de mejorar cómo lo hago)

Cómo hoy es “Día” de las Madres, quiero compartir algunos tics de cómo honrar a mamá: 
  1. Honrar a mamá es amarla y aceptarla por el hecho de ser mi madre... independientemente de mis juicios sobre su conducta y vida (que ha sido ejemplar), de sus valores…
  2. Honrar a mamá es escuchar y recibir con amor y respeto sus consejos... No un día o dos, sino siempre. Es llamarla casi todos los días, preguntar por su salud y su cotidianidad… escuchar sus quejas y su “me duele aquí o me duele allí” (achaques propios de la edad).
  3. Honrar a mamá es ser sincero y leal con ella, pero siempre en un ambiente amoroso.
  4. Honrar a mamá es compartir con ella de las bendiciones económicas que Dios me ha dado (no sólo el último domingo del mes de mayo, sino de modo permanente. Incluso sin importar si ella lo necesita o no, pero me obligo a estar pendiente de ella también en lo material).
  5. Honrar a mamá es sembrar en ella palabras de amor, en cualquier momento, en cualquier lugar...Alentando su vida. Dándole palabras de ánimo y aprecio.
  6. Honrar a mamá es compartir con ella una lectura, ahora que sus ojos están un poco apagado y ya no puede leer como antes (provengo de una familia de padres que no terminaron la primaria, pero que eran ávidos lectores y nos enseñaron eso y eso quiero devolverle a mamá).
  7. Honrar a mamá es hablar bien de ella con otros, perdonar si me ha herido, reconocer sus esfuerzos, que todos sepan que tengo la mejor mamá del mundo y que estoy agradecido de esto. Presentarla con orgullo a mis amigos y relacionados.
  8. Honrar a mamá es perdonar las heridas que pudo causarme. Comprender que en medio de sus limitaciones y adversidades me ha dado la vida y, en la mayoría de los casos, se esforzó al máximo por mí.
  9. Honrar a mamá es ser testimonio de cambio por el amor de Dios que hace transformaciones en mi carácter, en mi vida, cada día.


Honra a tu madre con tus palabras, con tu presencia, con un regalo, con una llamada de teléfono, con tu tiempo, con tu manera de vivir. Hónrala en todo tiempo no solo el día de las madres. No la maldiga ni con el pensamiento, porque eso traerá maldición a tu vida.

Dios nos de sabiduría para ser los mejores hijos que podemos ser y los padres que nuestros hijos necesitan.

Señor, sobre todas las cosas queremos darte a Ti la Honra y Honor en nuestras vidas, y hacer tu voluntad. Ayúdanos a ser hijos obedientes, hijos que honran a su madre y a su padre, trae sanidad, restauración y salvación a nuestros hogares….


En el nombre de Jesús…

domingo, 3 de mayo de 2015

Construyendo un matrimonio

¿Qué podemos hacer para tener un matrimonio perfecto y feliz?

Las investigaciones sobre lo que hace funcionar a un matrimonio demuestran que las personas con un buen matrimonio han realizado las siguientes "tareas" psicológicas:
  1. Separarse emocionalmente de la familia en la que crecieron, no al punto del distanciamiento, pero lo suficiente para que su identidad sea distinta de la de sus padres y hermanos.
  2. Desarrollar la unión en base a una intimidad e identidad compartida, y establecer simultáneamente límites para proteger la autonomía de cada miembro de la pareja.
  3. Establecer una relación sexual plena y placentera y protegerla de las intromisiones del lugar de trabajo y las obligaciones familiares.
  4. Para las parejas que tienen hijos, asumir el gran rol de la paternidad y absorber el impacto de la llegada de un bebé. Aprender a seguir trabajando para proteger la privacidad como pareja.
  5. Enfrentar y dominar las crisis inevitables de la vida
  6. Mantener la fortaleza del vínculo conyugal ante la adversidad. El matrimonio debe ser un refugio seguro en el que la pareja sea capaz de expresar sus diferencias, enojos y conflictos.
  7. Usar el humor y la risa para mantener las cosas en perspectiva y evitar el aburrimiento y el aislamiento.
  8. Nutrir la relación y apoyarse mutuamente, satisfaciendo las necesidades de cada cónyuge en cuanto a la dependencia y ofreciendo aliento y apoyo continuo.
  9. Mantener vivas las primeras imágenes idealizadas y románticas de cuando se enamoraron, al tiempo que se enfrenta la realidad tal cual es, y a los cambios causados por el tiempo.

Por ultimo concéntrate más en dar que en recibir, el matrimonio es para amar. Y amar es una decisión, no un sentimiento. Amar es donación. La medida del amor es amar sin medida.  No olvides: amar ya es recompensa en sí. Amar es buscar el bien del otro: cuanto más grande el bien, mayor el amor. Recuerda algo cuando estés en la época de crisis: “Todo se puede solucionar” si hay disposición de ambas partes. Lo que sería intolerable en un matrimonio es el abuso físico y mental, en estos casos no hay amor, porque el que ama jamás dañaría al otro.


(Judith S. Wallerstein, PhD, coautora del libro The Good Marriage: How and Why Love Lasts)